"Por qué pasé de un cubre aire acondicionado DIY a un DECOCLIM"
Cécile Leprêtre, conocida en Instagram como @lespenateslilloises, comparte desde hace varios años la renovación y decoración de su casa lionesa con un estilo cálido y auténtico. Apasionada por el DIY, había imaginado y fabricado su propio cubre aire acondicionado con tablones de madera, en un espíritu de slow design. Tras algunos años de uso, finalmente decidió pasarse a un cubre aire acondicionado DECOCLIM. Nos cuenta su experiencia y por qué no se arrepiente de este cambio.
1. La elección del DIY
¿Qué le hizo querer crear usted misma su cubre aire acondicionado?
Al principio estaba llena de entusiasmo y me dije: “¿Por qué comprar un cubre aire acondicionado si puedo hacerlo yo misma?”
Tenía ganas de bricolaje, de crear algo estético y discreto que se integrara en nuestra decoración. Imaginé un proyecto de “slow design”, reutilizando madera de alerce que me había sobrado de nuestro panel cortavientos. Atornillé, lijé, ajusté… y estaba orgullosa de mi pequeño cubre aire acondicionado casero.
2. Los límites encontrados con el tiempo
¿En qué momento se dio cuenta de que su cubre aire acondicionado casero tenía límites?
Rápidamente entendí que no lo había pensado todo. El proyecto era bonito, sí, pero había pasado completamente por alto el aspecto técnico. Y un aire acondicionado necesita un buen flujo de aire para funcionar bien… Visualmente, mi cubre aire acondicionado cumplía, pero en el uso era otra historia:
- En invierno, había que desmontar algunas partes para evitar que la factura eléctrica se disparara (y desmontar madera helada… sinceramente, no gracias).
- En verano, siempre tenía esa pequeña preocupación de que el aparato se sobrecalentara.
- Y con el tiempo, de tanto atornillar y desatornillar, la madera trabajó y el cubre se deterioró.
3. La búsqueda de una alternativa
¿Qué le llevó a buscar otra solución?
Me hicieron falta varias temporadas para admitirlo: mi cubre aire acondicionado DIY tenía sus límites.
Y en un momento dado, dejé de remendar. Quería una solución real, fiable y pensada para durar. Creo que el clic fue ese día de enero en el que tuve que desmontar el cubre aire acondicionado a -2°C, con los dedos congelados y los tornillos que chirriaban… Ahí me dije: “Vale, Cécile, quizá ha llegado el momento de pasar a otra cosa.”
4. El encuentro con DECOCLIM
¿Cómo descubrió DECOCLIM y por qué los eligió?
A DECOCLIM ya los conocía de nombre. De hecho, me habían contactado cuando compartí mi cubre aire acondicionado casero. Su mensaje fue muy amable: unas palabras para avisarme de ciertos riesgos, sin juicio ni crítica.
Mantuvimos el contacto a lo largo de los meses. Siempre un mensaje agradable, siempre con interés por saber si mi bricolaje seguía aguantando. Me pareció algo muy poco común — y valioso.
¿Qué me convenció? Su escucha, su paciencia, su enfoque humano. Nunca me presionaron para comprar. Y cuando decidí que necesitaba una solución real, acudí a ellos de manera natural.
5. La elección y la instalación
¿Qué modelo eligió y cómo fue la instalación?
Elegí un modelo sobrio, sin motivos. Para mí, un buen cubre aire acondicionado es aquel que se olvida. ¿Lo más difícil? ¡Escoger el color! Finalmente opté por un tono suave, ligeramente “tierra de sombra” — un gris con matices verdes, que combina perfectamente con la carpintería y el jardín. Sinceramente, la instalación fue sencilla. En una hora escasa ya estaba montado. Sin complicaciones, y sobre todo sin desmontajes estacionales.
6. El veredicto tras el uso
¿Qué ha cambiado desde la instalación de su DECOCLIM?
La mayor ventaja es la tranquilidad. Se acabaron los desmontajes estacionales, los sustos en las olas de calor, la madera que se deforma, los tornillos que crujen… Ahora es estable, bien ventilado, no se mueve. Estéticamente, es exactamente lo que quería: se funde con el entorno. Ya no se ve el aire acondicionado, se ve el jardín.
7. El consejo de Cécile
¿Qué consejo daría a alguien que duda entre DIY y DECOCLIM?
Si es por el placer del bricolaje, ¿por qué no? Pero para un cubre aire acondicionado duradero, discreto y eficaz, es mejor optar por una solución pensada para ello. No es “solo un cubre”: es un producto real, sólido, discreto, diseñado para durar todo el año en exteriores. Y sinceramente, pienso que debería haberlo hecho antes.
El testimonio de Cécile ilustra bien la diferencia entre un proyecto casero, incluso bien hecho, y una solución técnica diseñada para durar. DECOCLIM ofrece una respuesta estética y fiable, preservando al mismo tiempo el buen funcionamiento del aparato — para que el aire acondicionado siga siendo eficaz y podamos disfrutar plenamente del exterior.
Encuentra a Cécile en Instagram : @lespenateslilloises
Vídeo en colaboración con DECOCLIM : aquí